jueves, 6 de junio de 2019

Crónicas del desengaño (XII)

Lo que escribo, cuando escribo convencido:

No me imagino un deseo o un sentimiento amoroso que nazca, o se alce, si no es a partir del reconocimiento de la mortalidad, de imaginar seguro, el límite y desamparo de la experiencia de una muerte posible. Mi propia muerte: también el acabamiento del ser amado. Si yo pudiera decir, supiera decir, que el otro es plenamente identificable con un YO terminado y concluido, redondo, definido y autoproclamado, accesible en su totalidad, dócil a mi deseo, si no hubiera el riesgo de que el otro no está siempre ahí, o aquí, a la mano, cerca, próximo a mí, disponible, de que yo me confunda de dirección, o que mi movimiento erótico no llegue a su destino, o que mi pasión amorosa se extravíe, o no haya respuesta, sólo opacidad y más silencio, entonces no habría deseo ni afectación de ningún tipo. Decir amor sería decir nada. El deseo, el amor, se abre, parece, a esa indeterminación, a una desasosegante incertidumbre, a la posibilidad de fracaso y extravío; del mismo modo que tenemos conciencia plena del cuerpo sólo ante la enfermedad. Y este es el mayor incordio de toda relación o aspiración amorosa, que curiosamente, y no menos terriblemente, acaba como empieza, en una falta, con una ausencia. El amor, a pesar de todos sus gozos y quebrantos, nos recuerda intensamente e incesantemente que vamos a morir y que hemos luchado contra la muerte.

Lo que escribo descreído:

Estoy oyendo, poseído y entusiasmado, todos los audios de las tertulias en el Ateneo, de Calvo. Y me río, y mucho, y a carcajadas, y me soplo los dedos. ¿No tendrá razón Agustín García Calvo y precisamente será esta maldita condena de fijarlo, medirlo, programarlo, conocerlo, saberlo, apreciarlo, vivirlo todo sometido al Futuro, al tiempo, que es muerte, la que hace que lo que llamemos amor, el amor ordinario en el tiempo, el que nos sitúa frente al recordatorio de la muerte, no sea verdaderamente amor, amor del bueno, sino meramente eso: Futuro, sólo muerte, el mayor de los Futuros?  

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